Veranear en la calle Florida: instantáneas de Mansilla en Caras y Caretas

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26 mars 2021

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Lucio Victorio Mansilla photographie presse Belle Époque Buenos Aires Lucio Victorio Mansilla fotografía prensa Belle Epoque Buenos Aires

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Mariana de Cabo, « Veranear en la calle Florida: instantáneas de Mansilla en Caras y Caretas », América, ID : 10.4000/america.4361


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Buenos Aires constituye para Lucio Victorio Mansilla el escenario de sus puestas en escena. Bajo diferentes escenografías y disfraces, compone sus juegos teatrales. Desde 1902, el escritor y periodista se apropia de la ciudad a través de un nuevo medio: la revista Caras y Caretas. Según explica Verónica Tell (2009: 143), el semanario ofrece a la fotografía un lugar primordial. Se trata de una estrategia innovadora que ubica a la publicación en la vanguardia. Mansilla no queda al margen de este nuevo espacio mediático. El escritor se vale del código visual para poblar el imaginario de la sociedad porteña. De esta manera, aunque instalado definitivamente en París desde 1902, a través de las fotografías que publica la revista, Mansilla reafirma su presencia en Buenos Aires. Caras y Caretas se convierte en portavoz de sus idas y venidas a la ciudad. Cada artículo que describe su llegada a Buenos Aires se acompaña de fotografías. Estas imágenes más que ilustrar el texto se vuelven el mensaje principal del artículo.

Buenos Aires constitue pour Lucio Victorio Mansilla l’espace de ses mises en scène. Sous différentes scénographies et divers costumes, il compose ses jeux théâtraux. Dès 1902, l’écrivain et journaliste s’approprie la ville par le biais d’un nouveau moyen : le magazine Caras y Caretas. Selon Verónica Tell, l’hebdomadaire offre à la photographie la place primordiale. Il s’agit d’une stratégie novatrice qui place la publication à l’avant-garde. Mansilla adopte ce nouvel espace médiatique utilisant le code visuel pour peupler l’imaginaire de la société porteña. Ainsi, bien qu’installé définitivement à Paris dès 1902, par le biais des photographies que publie l’hebdomadaire, Mansilla réaffirme sa présence à Buenos Aires. Caras y Caretas se transforme en communicateur de ses allers et retours à la ville. Ces images, plus qu’illustrer le texte, en deviennent le message principal.

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