23 décembre 2014
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Godínez Rivas Gloria Luz, « Mujer-serpiente en México. De Cihuacóatl a Lukas Avendaño », Amerika, ID : 10.4000/amerika.5314
La serpiente juega dos roles contrapuestos en los mitos de origen que aquí nos ocupan: el judeocristiano, en el que el animal rastrero es causa del pecado original y la vergüenza, y el mexica, en el que la serpiente es origen de la vida, la fertilidad, el nacimiento y la salud. En ambos casos la mujer está íntimamente relacionada con la serpiente. En el mito tenochca, la mujer-serpiente, también llamada Cihuacóatl, nos permite recrear una serie de marcas de alteridad en nuestra cultura: tacto, superficie, deseo, seducción, instinto rastrero, cambio de piel y lengua bífida. Con esta última característica, la lengua dividida, identificamos al personaje histórico conocido como La Malinche, mujer traductora que permitió el “entendimiento” (condenado al malentendido) entre indígenas y españoles en la Conquista de la Nueva España. La Llorona, monstrua popular en México, aparece aquí como leyenda que reúne a la Cihuacóatl y la Malinche, pero también aparece como mercancía cultural. Para desatar la fuerza subversiva de la mujer-serpiente, cerramos este recorrido con un performer indígena homosexual que posa desnudo con un lagarto, Lukas Avendaño, quien nos recuerda que en su comunidad existen tres sexos: hombres, mujeres y muxes.