Les Centres de Santé constituent de nouvelles structures socio-médicales où exercent des équipes pluridisciplinaires intégrées dans leur quartier d’implantation. Leur nombre est encore très restreint en France.L’article s’intéresse à un aspect particulier de ces Centres : celui de la participation des usagers à la mise en place des structures communautaires de santé et à l’élaboration d’une politique locale de santé. L’exemple étudié est celui de la Villeneuve à Grenoble. L’expérience doit faire faire à une série de conflits relatifs à la participation et au financement.D’une façon générale, les causes des difficultés de la participation des usagers peuvent être liées :
Health Centers propose new socio-medical structures characterized by multidisciplinary teams rooted in neighbourhoods. Very few exist in France.This article tackles one aspect of these centers: user-participation in the elaboration of community health structures and local health policy. The case studied is that of "Villeneuve", a huge government financed residential complex in Grenoble. This project has faced several financial and participation problems.Generally speaking, the problems of user-participation are seen as being related to:
Los Centros de salud son nuevas estructuras médico-sociales en las que ejercen equipos pluridisciplinarios insertos en los barrios en los que desarrollan su acción. Su número es aún muy restringido en Francia.El artículo se interesa a un aspecto particular de estos Centros: la participación de los usuarios a la constitución de estructuras comunitarias de salud y a la elaboración de una política local de salud. El ejemplo estudiado es el de la Villeneuve en Grenoble. La experiencia muestra cómo se confrontan una serie de conflictos relacionados a la participación y al financiamiento del centro. En términos generales, las causas de las dificultades a la participación de los usuarios parecen estar relacionadas a la definición técnicamente estrecha, "médica", de la salud; a la forma principal de la lucha social, que se organiza en torno a la producción y sólo débilmente en torno a la reproducción de la fuerza de trabajo, sector al que pertenece la lucha por la salud, y finalmente, a la constelación de actitudes psicológicas ante los problemas de salud, que cargan afectivamente una aprehensión en términos de problemas vistos como individuales, que dificultan la traducción de estos problemas en términos políticos, aptos a ser tratados colectivamente.